Uno de los procesos más duros en que nos podemos encontrar es ver a un ser querido sufriendo por un problema emocional. Puede ser debido a un problema concreto, como puede ser un proceso sentimental, laboral, de salud o de otra índole, o por un cúmulo de ellos. En esas situaciones nos podemos sentir bloqueados sin saber cómo ayudar a alguien que está mal emocionalmente, a ese ser querido al que tanto apreciamos.
En este artículo, sin evidentemente, poder profundizar, ya que cada tipología de problema emocional es distinta, quiero dar unos cuantos tips sobre el mejor modo de ayudar.
Tabla de contenidos
Para ayudar a alguien que está mal emocionalmente, hay que estar bien y no caer en el contagio emocional.
En primer lugar, hay que tener en cuenta que el ser humano está hecho para ayudar emocionalmente a los demás. Y es por ello que nuestro cuerpo está desarrollado biológicamente para tal función. Existen en nuestro cerebro, las llamadas neuronas espejo, que nos van a predisponer para imitar conductas y expresiones, para posteriormente emocionarnos de la misma forma que lo está haciendo la otra persona.
El contagio emocional es, sin duda, un proceso psicológico positivo, ya que nos permitirá la sincronía con los demás y facilitará los procesos de comunicación. Pero cuando estamos ante una persona realmente afectada emocionalmente, si vemos que está desbordada, tenemos que intentar no caer en un contagio emocional desmedido si realmente queremos ayudarla. Si queremos ayudar a una persona que está mal emocionalmente, tendremos que evitar el contagio emocional.
Precisamente, tendremos que intentar estar bien para crear el contagio emocional a la inversa. Es decir, dotar a la persona de una mayor estabilidad emocional y moderar ese desequilibrio que estamos percibiendo.
Para tener ese equilibrio y poder ayudar a la persona es recomendable coger cierta distancia con el problema, hablarlo incluso con terceras personas de mucha confianza (siempre con mucho cuidado de preservar la confidencialidad), y buscar información fidedigna al respecto.
Es decir, si queremos ayudar emocionalmente a una persona que está sufriendo, deberemos en primer lugar mantenernos nosotros mismos bien emocionalmente. De otro modo, será difícil o contraproducente intentar ayudar.
Los consejos para ayudar a alguien que está mal emocionalmente.
Definitivamente, como norma general, hay que decir que se tienen que evitar los consejos a toda costa. Cuando una persona sufre emocionalmente quiere sentirse escuchada y comprendida, quiere que le validen sus emociones. Ello la ayudará a ir rebajando su malestar emocional y a ir cogiendo distancia con la fuente de generación de malestar.
Normalmente, los consejos no demandados parten de soluciones fáciles y poco adaptadas, ya que están basados en propias experiencias no acordes con la persona a la que se los damos. Por tanto, normalmente hacen más daño de lo que pueden aportar, aunque se haga con la mejor de las intenciones.
Hay veces que con la mejor de las intenciones se consigue el peor de los resultados.
Consejos generales para ayudar a alguien que sufre emocionalmente.
- Como primer consejo general, diría que es muy importante escuchar activamente, dejar que la persona se exprese y hacerle preguntas para comprenderla mejor, al tiempo que validamos sus emociones sin juzgarla.
- Hacer preguntas será un aspecto clave, ya que de ese modo permitimos irla sacando de su parte más emocional para que vaya conectando con la parte cognitiva del asunto que le provoca el malestar.
- El contacto físico será valioso. Tocar a la persona, sútilmente, cogerla de la mano, del hombro, acariciarla. Pero también cuidar la parte de comunicación no verbal, el tono de voz pausado. En definitiva, transmitir tranquilidad.
- Si en algún momento vemos que la persona respira con dificultad, acompañarla en la respiración. Validarle la ansiedad y decirle que se produce por el miedo.
- Ser capaces de retirarnos a tiempo. Saber que en el momento de tristeza va a requerir espacio, va a requerir soledad para interiorizar su proceso.
- No minimizar ni maximizar el problema. Empatizar. Cogiendo distancia. Evitar el llamado contagio emocional.
- Tener paciencia en el acompañamiento. Hay que pensar que hay situaciones que van a requerir tiempo.
Ayuda profesional para ayudar a alguien que está mal emocionalmente
Hace algún tiempo, hice un post hablando de este tema. Ayudar a alguien a que vaya al psicólogo. Aunque quiero dar cuatro pinceladas, ya que creo que debe ser un paso muy meditado y únicamente hay que hacerlo toda vez que se hayan acabado las opciones a los consejos que he dado para ayudar a alguien que está mal emocionalmente.
Simplemente tener muy claro que hay que escuchar activamente a la persona, hacerle preguntas y si realmente vemos que no contamos con las herramientas para sacarla de su malestar emocional, decirle que se nos escapa el problema y no podemos ayudarla, de una manera sincera.
Sin ningún tipo de estigma de salud mental decirle que ir a un profesional puede ser una gran inversión para evitar el sufriento emocional.
Hace un tiempo ir al psicólogo era de locos, en cambio, ahora es de locos, no ir al psicólogo.