En consulta me encuerntro muchas veces con situaciones problemáticas debida a los celos entre hermanos. La llegada de un nuevo hermano o hermana, trae aparejadas muchos aspectos, que cambian de manera importante la dinámica familiar. Por un lado, la enriquecen, porque crean sistemas de relación diferentes, que fomentan el crecimiento personal y familiar, pero por otro lado, acarrean asimismo situaciones difíciles de gestionar, y que trataremos en el artículo.
Para empezar hay que pensar en los celos como un sentimiento que existe en todas las personas, y muy frecuentemente protagoniza nuestras relaciones. Este sentimiento aparece por el miedo a perder el amor de un ser querido debido a que aparece otra persona más interesante. Así, queda claro, que los celos entre hermanos se producen porque existe el amor, en el caso de los hijos, es un claro símbolo de amor hacia los padres.
Normalmente algo de celos se consideran normales, pero nos empieza a preocupar cuando lleva aparejados la pérdida de hábitos ya adquiridos (limpieza de dientes, rabietas, comidas…) , Eneurésis ( pérdida de orina no deseada durante el sueño) o agresiones al hermano o hermana. También muchas veces se manifiesta en la escuela, con falta de atención, agresividad hacia compañeros o profesores, etc.
Este tipo de situaciones generan un aumento de la tensión en todo el sistema familiar, que retroalimenta los celos y los problemas asociados. El menor, además de percibir los celos, se sentirá culpable por sentir algo que le sale de su interior y que no puede remediar.
Los celos se suelen asociar como normales del hermano mayor hacia el pequeño, pero el pequeño los tiene igualmente, y se considera normal que los muestre. En estos casos, los celos suelen ser recíprocos.
NO NEGAR LA EXISTENCIA DE CELOS
Lo primero que hay que tener claro, es que los celos los tenemos todos, en mayor o menor medida. Los niños los expresan de manera más significativa. No negar su existencia será un primer paso para su normalización y nos permitirá trabajar con ellos y educar al menor en este sentimiento.
El menor percibirá la normalización de su sentimiento y no le haremos sentir culpable, así podrá acostumbrarse a sentir. Eliminando la culpa le quitamos mucho peso de encima. Ello ayuda a su crecimiento sin tensión y evita las conductas aparejadas. También fomentamos que tenga la tranquilidad para gestionar ese sentimiento.
Mi recomendación es nombrarlo directamente en casa, perder el miedo a decir la palabra tabú: celos, celos celos….
TODOS LOS HERMANOS NO SON IGUALES
Todas las personas ejercemos roles o papeles en la vida, en nuestro trabajo, con nuestro grupo de amigos. Ello ayuda a definirnos, definir nuestra identidad y nuestra personalidad, algo básico para nuestro crecimiento personal. Cuantas veces oimos, yo soy muy buen padre, yo soy muy despistado, a mi no me gusta cocinar… o si, o no soporto a la gente que…. Todo ello, configura nuestro papel en la vida y nos dota de identidad, de saber quienes somos, de situarnos dentro del grupo.
Como en cualquier otro ámbito, en la familia todos tenemos un papel. Antiguamente la madre llevaba aparejadas unas funciones y el padre otras, afortunadamente, todo esto ha cambiado y cada familia define quien se ocupa de que, cuando y como. Ello lleva aparejado indudablemente mucho diálogo y empatía entre los miembros de la familia, cosa que no es fácil, y que merecería un artículo aparte. Pero igual que los padre, los hijos necesitan tener un papel en la familia. El hermano mayor tendrá unas obligaciones y unas características diferentes a las del pequeño, y tiene que saber que no son iguales. Con ello, ningún miembro quedará excluído y ayudaremos a los hijos a situar su papel familiar y algo muy importante, disminuir la tensión, y de nuevo, las conductas que queremos evitar.
Hay que perder el miedo a decirles a los hijos que son diferentes, y que los consideramos diferentes. Ojo, no tiene nada que ver con querer más o menos.
En futuros artículos nos adentraremos más en las dinámicas familiares. Si necesitas algún tipo de información, puedes contactar con nuestro equipo de psicólogos.